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La caravana de miles de migrantes, que partió de la frontera sur de México como la más numerosa del año, cuestionó este viernes durante su avance el conteo que hace de ellos el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, quien afirma que se han dispersado y que quedan cerca de 1.500.
En una reunión desde el campo de fútbol del municipio de Mapastepec, el coordinador del Centro de Dignificación Humana (CDH), Luis Rey García Villagrán, quien acompaña la caravana, afirmó que aún van 5.000 personas en el grupo más numeroso, que salió en Nochebuena con unas 10.000 personas desde Tapachula.
Los migrantes se identificaron como originarios de Honduras, Salvador, Guatemala, Haití, Cuba, Perú, Colombia y Nicaragua, pero también hay de países como Tailandia y Azerbaiyán, quienes esperarán por 24 horas una respuesta del Instituto Nacional de Migración (INM), si no, saldrán este sábado rumbo a Pijijiapan.
"Nosotros nos sentimos abandonados y nos tenemos que exponer a los políticos, nosotros no somos una plaga, ni una pandemia, sino que queremos una vida mejor para mis hijos y todos los migrantes", expuso a EFE el haitiano Edrice Roman.
El migrante afirmó que han caminado más de 100 kilómetros desde Tapachula, en el límite de México con Guatemala, hasta Mapastepec, donde han instalado un campamento en un campo de fútbol para esperar una respuesta del Gobierno para que les otorgue un estatus legal en el país.
"Ayer fueron más de 32 kilómetros, mi esposa está cansada, los niños la pasaron mal en el camino, durmiendo y caminando bajo el sereno", aseveró.
La caravana migrante choca con el Gobierno
La caravana avanza mientras el mandatario mexicano afirmó este viernes que "está bajando la migración" tras la visita del miércoles de una delegación de Estados Unidos liderada por su secretario de Estado, Antony Blinken, para abordar el inédito repunte migratorio de diciembre.
"Ya hay incluso buenos resultados. Claro, tiene que ver también con el fin de año, para no echar las campanas al vuelo, pero está bajando la migración. ¿Se acuerdan que ayer hablábamos de los 10.000 de la caravana? Hoy volvimos a confirmar que (ya) son 1.500", aseveró López Obrador en su conferencia matutina.
Pero el grupo, bautizado como 'Caravana del éxodo de la pobreza', pidió al Gobierno de México visas por razones humanitarias o, de lo contrario, seguirá avanzando por Chiapas, estado fronterizo con Centroamérica.
El coordinador del CDH denunció que el INM iniciará con la persecución, detención y deportación de los migrantes.
"El Gobierno ha decidido no entregar documentos, ha decidido cerrar las puertas de la Comar (Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados) y del Instituto Nacional de Migración, por lo que se empezará con la contención y eso se traduce en que entregue a los más vulnerables al crimen organizado", aseveró García Villagrán.
El salvadoreño Adonay Martínez pidió compasión al mandatario para que el Gobierno les otorgue documentos para permanecer cierto tiempo y trabajar en México.
"Hay mucho temor de ser detenidos, por ello, algunos nos mantenemos alrededor del señor abogado (García Villagrán) acá y no salimos del área, nos están agarrando y deportando de regreso, hay muchas personas que fueron agarradas y llevadas así", expresó.