Al uso de cigarrillos electrónicos a menudo se le conoce como vapear debido a que muchas personas consideran que éstos producen un vapor el cual es luego inhalado y se utiliza como reemplazo del cigarrillo común bajo la falsa creencia de ser menos dañino para la salud y el organismo, pero la verdad es que lo que producen los cigarrillos electrónicos es un aerosol de diminutas partículas, lo cual es distinto a lo que se entiende por vapor y puede terminar por quemar garganta y pulmones.
"Son muy dañinos, son muy peligrosos, y justamente esta menara que tienen de venderlos como si fueran un juguete con figuras llamativas para niñas, niños y adolescentes, que los padres de familias no disminuyan el riesgo, porque no perciben olores desagradables". - Selene Maldonado, Directora del Consejo Estatal Contra las Adicciones (CECA9 en Nayarit.
¿Cómo funcionan los cigarrillos electrónicos?
Los cigarrillos electrónicos calienta un líquido que es vertido en su interior para convertirlo en aerosol, lo cual es referido como vapor, el consumidor inhalan esta sustancia llegando a sus pulmones, el líquido en la mayoría de los cigarrillos electrónicos contiene nicotina, una sustancia adictiva, pero ahora en la modalidad de vapeadores wax se puede agregar marihuana directamente que es disimulada con otros olores disfrazados, incluso su hijo podría estar drogándose frente a usted sin que lo perciba.
"Encontramos también uso de Wax, que es el uso de canabis en una formación centrada que aún tiene mucho aumento de la sustancia activa pero viene mezclada con aroma, se puede estar fumando al lado de su mamá y va a seguir pensando que es un vapeador que huele a vainilla y está fumando marihuana". - Alejandro Villegas, Director Clínico del Cebntro de Rehabilitación MARAKAME en Tepic, Nayarit.
Además es importante mencionar que el llevar a cabo esta práctica de forma rutinaria produce tos, dolor de pecho y abdomen, fiebre y escalofríos, náuseas y en algunos casos vómito, y enfermedades pulmonares, ¿y tú ya checaste lo que consume tu hijo?...
ALBERTO CARDONA, MEGANOTICIAS.