Dibujando sonrisas, es un proyecto que inició en 2016, gracias a Maru Machain, quien por la necesidad de ayudar a quienes menos tienen, comenzó a buscar padrinos y madrinas para niñas y niños marginados y que estos recibieran un regalo en navidad, aquel año 60 niños y niñas de dos casa hogar recibieron a "Santa Claus", actualmente entre 2000 y 2500 menores de Tepic, Del Nayar, La Yesca, Tuxpan, Ruíz, Acaponeta y Tecuala serán apadrinados. Y aunque pudiéramos pensar que estos pequeños piden artículos sofisticados, de última tecnología o similares, lo cierto es que no. "Me atrevo a decir que un 80% de las cartas piden cobijas, piden zapatos, para ir a la escuela, piden mochila y útiles escolares, un 80% de las cartas. Se localizan las comunidades gracias a las maestras de comunidades indígenas porque la verdad es a través de ellas que llegamos y así los padres y las madres de familia tienen la confianza", explicó Kathya Montoya, colaboradora en Dibujando Sonrisas.
Al vivir en comunidades con alta marginación y en diferentes grados de pobreza piden cosas que para quienes vivimos en un contexto urbano podrían parecer algo normal y cotidiano de tener en casa. Por ejemplo en Nayar, municipio que fuera catalogado como el más pobre del estado por la CONEVAL, el 44.8% de las viviendas tiene piso de tierra, el 86.81% habla una lengua indígena y el 58.6% solo estudio hasta la secundaria. En La Yesca, el segundo municipio con mayor pobreza, el 69.5% de la población estudió únicamente hasta la secundaria y el 23.8% de las viviendas tienen piso de tierra. Destaca además que los padres de estos menores, la mayoría, se dedican a la pesca, son jornaleros que trabajan por temporada en el corte de caña, o tabaco, por lo que pensar en comprar regalos para navidad, no está en sus planes. "Una vez un niño de ahí de naranjito del copal, hace dos años, pidió pan, frutas y queso, no pidió un juguete, ni unos zapatos, ni una cobija, no, pidió comida. Hubo otra niña con otra carta que dijo yo quiero una sandía para comérmela yo sola, no le voy a dar a nadie", agregó.
Kathya precisó que a cada menor se le pide escribir hasta 3 opciones de regalo en su carta, pero tras conocer las historias y peticiones de los pequeños, el 70% de los padrinos y madrinas, terminan comprando las 3 y a veces algo extra, como puede ser una cobija, unos zapatos o una despensa.
Dibujando sonrisas aún tiene cartas disponibles y si tu deseas colaborar puedes comunicarte a su fan page, o al número 311 119 0589, donde te asignan una de las 200 cartas que aún esperan una madrina o padrino..