Si bien las zonas turísticas del sur del estado pueden hablar de una recuperación económica tras los dos años de pandemia, las micro y pequeñas empresas no han corrido con la misma suerte, los estragos dejados por los dos años de actividad limitada y las condiciones económicas actuales son solo algunos de los factores que propician esta situación.
"El incremento en la inflación, el incremento en las tasas de interés pues están afectando mucho a las empresas, principalmente aquellas pequeñas y micro empresas que están que tienen algún crédito, verdad. En ciertos artículos, en ciertos rubros también hay mucho problema todavía de desabasto, lo cual complica la operación de las empresas", aseguró el presidente de la COPARMEX, Alejandro Valdés Menchaca.
El campo es una área con mucho potencial pero a la que no se le ha sacado el provecho adecuado, pues todas las condiciones globales han hecho que más productores mexicanos y nayaritas puedan exportar sus productos, lo que deja mejores ganancias. "Hay empresas que están teniendo gran éxito con la exportación de frutas, hortalizas, que debemos de buscarlo. Hay que empezar a buscar proyectos y no regresar a los cultivos tradicionales porque definitivamente los cultivos tradicionales nunca vamos a ser competitivos contra los mercados internacionales", afirmó.
Por último aseguró que la parte más difícil para los empresarios ha sido lidiar con el aumento en impuestos, tasas de interés y la misma inflación. Por ejemplo tan solo los alimentos han incrementado un 12.93% lo que termina pegando no solo en los bolsillos de las familias sino también en muchas empresas.