En el mes de enero, Nayarit logró rebasar el 80% de ocupación hospitalaria tras el incremento en los casos positivos de COVID, lo que junto con otros indicadores, llevaron al estado al color rojo en el semáforo epidemiológico y el endurecimiento de las medidas de restricción de la movilidad. Luego de dos semanas de estas medidas y el retroceso en el semáforo, los números empiezan a bajar casi a la mitad.
Nayarit registra un 43% de ocupación hospitalaria con 155 camas ocupadas de 339 disponibles:
De seguir con estos números a la baja Nayarit podría ser considerado a descender de color en el semáforo epidemiológico, a naranja. Aunque, según explicó el epidemiólogo, la letalidad del virus también jugaría un papel importante para tal descenso.