Escuelas de la UAN logran pausar incorporación a los SEPEN
La justicia federal concedió una suspensión provisional a la primaria y a la secundaria mártires del 20 de febrero de la UAN para evitar que estos planteles sean desincorporados de la Universidad y adheridos a los Servicios de Educación Pública del Estado, por lo menos hasta que un juez resuelva el fondo de la controversia interpuesta sobre este asunto, por el consejo escolar de participación social.
La resolución permite que los planteles sigan operando como lo han hecho hasta ahora, brindando educación a las hijas e hijos de los trabajadores universitarios, imponiendo las siguientes medidas cautelares:
- Que se garantice la educación en ambos planteles.
- Que no se desconozca la acreditación del ciclo escolar.
- Que se garantice el derecho a la educación de las niñas y niños.
- Que se impida cualquier acto discriminatorio.
- Y lo que muchas madres y padres solicitaban, que se continúe con el proceso de inscripción para el próximo ciclo escolar 2023-2024.
Fue a principios de enero del 2023 que padres y madres trabajadores así como estudiantes y personal de los planteles educativos, se manifestaron mostrando su inconfomidad con la desición de desincorporar los planteles de educación básica de la Universidad, como lo propuso el Gobierno Federal y que quedó asentado en el convenio tripartita que se firmó entre Gobierno Federal, El Gobierno estata y la Universidad para que esta última pudiera acceder a recursos extraordinarios.
Marchan para exigir premanencia de los planteles de educación básica
Padres de familia y estudiantes del Instituto Mártires del 20 de febrero, se manifestaron este lunes para exigir una respuesta de las autoridades de la rectoría de la Universidad Autónoma de Nayarit, al respecto de futuro que tendrá esta escuela, pues luego de darse a conocer el convenio con la federación para la entrega de recursos extraordinarios y la exigencia de desincorporar este plantel y el CENDI, no saben si continuarán teniendo este servicio los trabajadores universitarios.
Una de las madres de familia señaló que más allá de una simple comodidad por tener el plantel cerca, para ella significó la diferencia entre poderle dar una educación adecuada a su hija quien sufre de epilepsia y había sido rechazada en varios planteles, así mismo relata que una niña con síndrome de Down, puede ingresar con su maestro sombra, lo que no les permiten en otros planteles.
Los padres de familia reiteraron que la escuela se construyó gracias a las aportaciones que ellos como sindicalizados hicieron y que es un derecho laboral ganado a través de los años, por lo que requieren una respuesta contundente incluso para saber si este próximo periodo escolar podrán abrir las inscripciones o si deberán buscarle nuevas escuelas a sus hijos e hijas.