La temporada de sequía o conocida también como estiaje en este 2023 ha aumentado el impacto no sólo ambiental que ha repercutido por los incendios forestales, la devastación de pastizales y la reducción considerable del agua extraída del subsuelo, sino que además ya ha comenzado a ocasionar pérdidas en el sector ganadero, con la muerte de cabezas de ganado, principalmente en la zona serrana de Nayarit.
"También en algunas partes se están quemando los bosques de la sierra, ¿y el ganado cómo está?, -el ganado se está enflacando más cada día, ya muriéndose de hambre porque no hay agua".- Esteban López Díaz, habitante del municipio Del Nayar en la zona serrana de Nayarit.
Y las pérdidas también van encaminadas hacia la producción agrícola, pues al no contar con el agua suficiente, esta debe ser considerada para el uso doméstico o la alimentación del ganado o la labranza del campo, por ello tampoco es que este año se podrá tener una buena producción de granos como frijol o maíz.
"¿la producción por ejemplo los sembradíos de maíz?, no pues de eso ya no hay rastrojo, nada de eso hay, nosotros sembramos en tiempo de lluvias y ahorita ya no hay, está todo pelón". - Esteban López Díaz, habitante del municipio Del Nayar en la zona serrana de Nayarit.
Y esto finalmente ha derivado en la migración de los habitantes de las comunidades indígenas y zonas rurales hacia la ciudad, en búsqueda de trabajos formales, sin embargo terminan realizando labores de artesanía, un efecto secundario que deriva del cambio climático que nadie había considerado antes.
ALBERTO CARDONA, MEGANOTICIAS.