A tan solo unos días del lanzamiento de la nueva red social Threads, empresas dedicadas a la ciberseguridad ya han detectado a estafadores que se han aprovechado del auge que ha causado entre los usuarios para realizar delitos mediante el llamado Phishing.
De acuerdo a empresas como Kaspersky, "los ciberdelincuentes están utilizando una supuesta versión web de la app, con el objetivo de obtener acceso no autorizado a sus cuentas, datos personales e incluso sus finanzas. Tan sólo en un periodo de 24 horas, se identificaron más de 200 enlaces sospechosos que utilizan esta plataforma como gancho".
En una de las trampas detectadas, los estafadores promocionan salarios de un promedio de 2 mil dólares para que personas den "me gusta" y comenten sobre las publicaciones en la nueva red social. "El único requisito es que las víctimas compren la aplicación ?Threads Lucrativo?, la cual se ofrece por 30 dólares. Hay indicios de que esta estafa ha estado en circulación desde el pasado 7 de julio, dos días después del lanzamiento de Threads".
De acuerdo con Kaspersky, también se ha detectado que los estafadores han desarrollado páginas de phishing que imitan una versión web inexistente de Threads para engañar a los usuarios y hacerlos que ingresen sus credenciales de inicio de sesión y dado que Threads está vinculado a otros servicios META, los usuarios también pueden correr el riesgo de perder el acceso a varias cuentas de redes sociales, como Instagram y Facebook.
Las empresas de ciberseguridad y desarrolladores de antivirus, recomiendan seguir estas medidas de prevención:
Tener cuidado al descargar un programa, sobre todo si es de una web no oficial. Así, se debe priorizar siempre las páginas oficiales del creador del programa o las tiendas oficiales de Google y Apple.
Desconfiar de los mensajes que ofrecen salarios elevados, grandes descuentos u ofertas "gratuitas". Estas son las promesas más habituales en las estafas online.
Comprobar la dirección del sitio web, así como buscar errores gramaticales o el uso de términos genéricos. Los sitios web oficiales siempre empiezan con el nombre de la institución. La ausencia del nombre es siempre una alerta de estafa importante.