¿Eres de las personas que les gusta grabar retos para las redes sociales?, ¿buscas conseguir más fans, incrementar el número de likes, o simplemente estar en tendencia?, esta información te podría ser de mucha utilidad, ya que una pena máxima de hasta 40 años de prisión podrían enfrentar aquellas personas que durante la grabación de algún reto viral para las redes sociales, cometan accidentalmente lesiones o agravio en contra de otra persona.
"Los videos que actualmente suben la mayoría de los jóvenes sí implica cometer un delito; se le llama No Culposo porque no se hace con la intención, están haciendo una grabación, un reto y en ese reto se puede cometer una fractura o un homicidio también, las penas pueden variar, hay penalidades de 5 hasta 40 años todo va en base a cómo fue la conducta y la tipicidad de lo que se haya cometido". -Gerardo Santana Monteón; Presidente de Abogados Colegiados del Estado de Nayarit.
La imputación de cargos estará fundamentada con base en las pruebas recabadas durante la grabación y el testimonio tanto del acusado como del acusante, y pese a que para poder ser grabado quien accede otorga su autorización, esto no exime ni deslinda de responsabilidades al agraviante.
"Regularmente la persona que lo va a realizar pide que lo estén grabando para poder subirlo a las redes sociales y poder de alguna manera obtener likes o que pueda ser viral su video, la responsabilidad sería que quien esté grabando el video provoque alguna lesión o en su caso estén utilizando menores de edad".
Hoy en día múltiples han sido los accidentes que han podido ser grabados, documentados e incluso transmitidos en vivo durante la realización de dichos retos virales, basta con mencionar el caso más conocido de Morgan Holgerson, una jóven de Vancouver; Washington de tan sólo 16 años de edad que fue empujada de un puente a 15 metros de altura por su propia amiga Taylor, quien actualmente enfrenta un proceso legal por hasta 1 año y medio de cárcel o trabajo comunitario tras haberse declarado no culpable del delito por poner en peligro la vida de alguien sin medir las consecuencias.
ALBERTO CARDONA, MEGANOTICIAS.