El 21 de diciembre del 2019 el gobernador Antonio Echevarría y el alcalde Javier Castellón hicieron el compromiso de construir un espacio dedicado al comercio ambulante, eligiendo un edificio contiguo al ayuntamiento que servía de oficinas administrativas pero estaba ya en malas condiciones.
El proyecto, según Gilberto Gameros, director de obras públicas municipales se realizará con la intención de que sean áreas abiertas, se trata de una estructura de dos niveles, que costará aproximadamente 22 millones de pesos. "No habrá kioscos, no habrá espacios delimitados, es una área como si fuera una calle o sea tú subes y en dónde estás pues ahí te pones y a lo mejor pues con el tiempo entre los usos y costumbres pues cada uno de los vendedores ambulantes autorizados, hay que decirlo así autorizados, pues bueno van a poder definir su área, su espacio; sin embargo no va a haber kioscos no va haber ningún elemento que obstruyan y visualmente ni de manera en términos de movilidad para que la gente se despliegue de manera libre", explicó.
La intención, señaló, es que el área de abajo ayude a incrementar la superficie de la plaza, integrando también la plaza construida en la calle puebla, disponiendo de un espacio libre para actividades culturales, artísticas y cívicas. Mientras que el primer nivel será para los ambulantes, y se acondicionará con rampas eléctricas. "La idea es o la intenciones de que el vendedor ambulante suba por la rampa sus equipos su mercancía se establezca en esta explanada arriba y la intención de ponerlos arriba es para que abajo no se contamine el espacio otra vez con el tema ambulante. Se le pretende que se abran algunos accesos para que se integren a la segunda planta del mercado Juan Escutia, es decir también pretendemos que se reactive el segundo piso del mercado", agregó.
Cabe señalar que el ayuntamiento capitalino fue el encargado de demoler la estructura y elaborar el proyecto ejecutivo que fue entregado a la Secretaría de Infraestructura del estado para la programación del presupuesto.