La desinformación, la desprotección y la violencia a la que están sujetas las mujeres indígenas son las principales causas por las que se registra un gran número de embarazos forzados y aunque muchas de ellas deciden dar a luz, se enfrentan a un futuro incierto, de carencias; las que deciden abortar lo hacen solas, en condiciones de riesgo e insalubres, que ponen en peligro su vida. "Estamos en situación de vulneración las mujeres indígenas verdad, por el desconocimiento porque no hay esa educación temprana de los anticonceptivos, desde menores de edad, porque se está dando mucha violencia también violencia sexual hacia la mujer desde temprana edad desde los 12, 14 años", explicó Marina Carrillo, presidenta de las Mujeres Indígenas de Nayarit.
La lideresa señaló que cada año ellas pueden contar hasta 10 casos de aborto espontáneo o provocado, lo que ha llevado a mujeres y niñas a ser detenidas, sobre todo cuando sus famliares se dan cuenta y alertan a las autoridades. "Nos dimos cuenta de una chica (menor de edad) que estuvo mal como de sus facultades, ella fue abusada, supongo, yo solamente la vi en la carcel porque hacemos visita, entonces a ella pues se le abusó y abortó, se le vino el aborto espontáneo, supongo, en el arroyo y la detuvieron", afirmó.
Marina Carrillo precisó que el consumo de alcohol y drogas han sido determinantes en el aumento de la violencia hacia las mujeres en estas comunidades, pues los hombres comienzan a consumir sustancias estupefacientes desde los 12 años; consideran además que no hay políticas, ni acciones gubernamentales que estén atacando estos problemas y la alerta de violencia de género es letra muerta, dejando a las mujeres y niñas indefensas.