¿Pagan los candidatos por usar canciones de moda en campañas?

Es común que durante el periodo de campañas, los candidatos a un cargo de elección popular utilicen todos los recursos disponibles para ser recordados por los ciudadanos y ser una de sus opciones al momento de emitir el voto, y en los últimos años se ha popularizado el uso de canciones famosas con la letra modificada en la que se habla de las cualidades del político, sin embargo cuando se piensa en el dinero que se gasta en publicidad es necesario preguntarse cuánto se paga por el uso de una melodía con este fin. "Yo creo que tiene que depender mucho del tipo de artista, de canción, de cuantas reproducciones, tiene y basarse precisamente en el tabulador, otra cosa es que hay muchas sociedades de gestión colectiva Aquí un ejemplo precisamente para la cuestión de música está la sociedad de autores y compositores de México que son aquellas las que tienen un listado de tarifas y dependiendo de la canción, del artista van a ser diferentes tipos de costos", explicó Mariza de la Mora, especialista en propiedad intelectual en ClarkeModet

En México, la ley federal de derechos de autor regula esta situación, el artículo 58 y el 131 bis hablan de que debe existir un pago hacia el autor, compositor o quien sea el propietario de los derechos de la letra y fonogramas para poder ceder los derechos para su reproducción; mientras que el artículo 231 habla de la sanción que se podría tener en caso de utilizar una pieza sin autorización, y que pueden ir desde los 708 mil 500 pesos hasta los 5 millones 668 mil pesos. "Los artistas se pueden negar a autorizar el uso de sus canciones por no compartir alguna ideología política, también hay casos, porque en la campaña de Trump, por ejemplo, hubo muchos artistas que se quejaron de que sonaban sus canciones en sus mítines de campaña".

Únicamente los partidos políticos pueden revelar exactamente cuánto se gastó en una licencia de este tipo, y debe solicitarse mediante los diversos mecanismos de transparencia, pues entre los tabuladores manejados por la Sociedad de autores y compositores o la Sociedad General de Autores y Editores, no precisan el monto para este tipo de contratos, pues se debe pagar por el uso de la canción y la modificación de la letra.

Se imagina usted entonces ¿Cuánto gastaron los candidatos del 2017, por usar El corrido de Nayarit como el actual gobernador Antonio Echevarría o Manuel Cota por la canción La gozadera, o cuánto pagó movimiento ciudadano por la composición original del movimiento naranja?