Más de 25 mil expertos en ciberseguridad serán requeridos en los próximos años en México, pues la digitalización de la vida diaria, además de facilitar trámites, compras y demás, también pone en riesgo nuestra información haciéndonos vulnerable a delitos digitales. Es por ello que a través del Laboratorio de Investigación en seguridad informática e inteligencia artificial, la UAN prepara a los futuros desarrolladores, quienes deben proteger la información que se comparte en los canales digitales. "Esos canales inseguros siempre van a estar al acecho de usuarios o personas mal intencionadas con el propósito de acceder de modificar de alterar la información que por ahí transita entonces nuestro objetivo es la de proporcionar alguna solución que ayude a detectar de manera oportuna cualquier intento de comprometer la seguridad edad infraestructuras", precisó el docente Pablo Velarde.
El docente señaló que actualmente trabajan en proyectos que incorporan la seguridad informática y el aprendizaje automático, una rama de la inteligencia artificial, para que las máquinas aprendan a detectar posibles ataques a los. sistema, "La incorporación de la inteligencia artificial nos va a poder ayudar a hacer predicciones que a tiempo ayuden a alertar a los sistemas de que logren detonar una medida de contención antes de que se origine el ataque. Ese patrón de comportamiento se puede distinguir cuando son condiciones digamos de operación normal que aquellas que son anómalas o que tienen una tendencia a algo que difiere de lo que típicamente pudiera ser", agregó.
El docente también señaló que en el tema de ciberseguridad siempre estará presente la incertidumbre y el peligro de caer presas de un engaño digital, puesto que el eslabón más débil de la ciberseguridad, es el mismo usuario, o sea las personas. Para evitar esto recomendó estar atentos a los mensajes, correos y todo lo que recibimos través de las vías digitales, así como siempre tener actualizados nuestros equipos de cómputo, celulares, tabletas, pues las mismas empresas brindan herramientas de protección, "nosotros podemos caer víctimas a lo mejor de un engaño, los ataques que logran tener mucho éxito, ya digamos a nivel de usuarios, incluso a nivel de empresas a veces se basan en cosas tan simples como el engaño, le llaman dentro de este campo ingeniería social."
El laboratorio se creó en 2010, luego de que el docente volviera de un doctorado y cuando se percató de la necesidad de una área como esta y a través de proyectos que se han realizado con apoyo del CONACYT es que se ha logrado equipar este espacio que es aprovechado por estudiantes de licenciatura y posgrado.