Experiencias como la del sismo del 19 de septiembre de 1985 que sacudió a nuestro país y que volvió a repetirse 30 años más tarde en 2017, nos han demostrado la capacidad que tenemos para reponernos ante las catástrofes naturales, pero también dejan ver la falta de prevención y la memoria corta que tenemos los mexicanos, especialmente empresas, dependencias y centros escolares para realizar capacitaciones constantes de actuación inmediata ante este tema.
"Es que precisamente estos ensayos no sirven para poder precisar las fallas que podemos tener en cada uno de los inmuebles, los inmuebles son distintos unos de otros, y la cantidad de personas también depende mucho". - Héctor Pedro Núñez Bueno, Director de Protección Ciudadana y Bomberos de Nayarit.
Por ello es que año tras año se lleva a cabo el simulacro nacional, que en esta ocasión representará un sismo de magnitud 7.5 en la escala de richter, no obstante lo que ha detectado el personal de inspección de edificios es una serie de fallas para la evacuación de ciudadanos en este tipo de movimientos telúricos y otros fenómenos como incendios o derrumbes.
"Hay inmuebles que no tienen, por ejemplo rampas para personas con discapacidad, hay algunos que tienen escaleras muy reducidas o situaciones que no tienen área de punto. seguro, ¿las salidas de emergencia que son muy amplias se han detectado si se tienen bloqueadas?, -si, muchas veces están bloqueadas o tienen por ahí material que de alguna forma impide una situación de esa naturaleza son situaciones que nosotros en la evaluación realizamos". - Héctor Pedro Núñez Bueno, Director de Protección Ciudadana y Bomberos de Nayarit.
De acuerdo al Centro Nacional de Prevención de Desastres, tan sólo el temblor de 1985 dejó 9 mil 500 muertos y 41 mil millones de pesos en pérdidas materiales, sin embargo aunque esto ha quedado registrado en el archivo, se ha quedado también en el pasado, pero quién no recuerda su historia está condenado a repetirla.
ALBERTO CARDONA, MEGANOTICIAS.