En pleno 2019 la violencia política por razones de género no se ha tipificado a nivel nacional, aun cuando se han presentado alrededor de 20 iniciativas en la cámara de diputados desde el 2015. Pero ¿por qué es importante hablar de este fenómeno? porque las cifras de violencia en la política motivada por género, crece al igual que la participación de las mujeres en este ambiente.
Por ejemplo en el proceso electoral del 2015 se contabilizaron 38 casos de violencia en contra de mujeres. Durante el proceso electoral del 2017 - 2018 se abrieron 6 carpetas de investigación en la FEPADE y 41 números de atención.
Y en la jornada más reciente del 8 de septiembre 2017 al 12 de junio 2018 16 mujeres políticas asesinadas. 7 eran candidatas y precandidatas. Los tribunales electorales locales y federal recibieron en ese mismo periodo 85 casos en total. Puebla fue el estado con más denuncias, (15)
De acuerdo a una investigación hecha en latinoamérica y donde participaron políticas mexicanas se descubrió que el 46% había sido discriminada por ser mujer y el 26.12% que sufría alguna agresión por razones de género ni siquiera lo denunciaba.
El caso que inició el desarrollo del protocolo de atención, data del 2016; Aidé Nava González precandidata a la alcaldía de Ahuacuotzingo Guerrero, fue secuestrada y asesinada, por un comando de la delincuencia organizada que amenazó a otros y contendientes, ese año se registraron 103 casos de agresiones
Otro caso igual de relevante en este tema es el ocurrido en la alcaldía en Chenalhó, Chiapas, en 2011 cuando Rosa Pérez la primer mujer en ocupar un puesto como este, y tres mujeres mixes más, fueron amedrentadas y "destituidas" por los ciudadanos que no estaba de acuerdo "en ser gobernados por mujeres".
Otro caso que sentó precedentes en 2016 fue el de la alcaldesa Felicitas Muñiz, quien era desacreditada, por sus mismos compañeros del cabildo en Guerrero. Incluso le robaron material de construcción para entorpecer el inicio de una obra, iniciando un enfrentamiento entre pobladores, además de que su familia fue víctima de extorsionaron y agresión.
El pasado proceso electoral dejó uno de los episodios más oscuros en Puebla, ahí 3 candidatas morenistas Elizabeth Martinez, Ana Reyes Mendoza y Alma Salinas Martínez denunciaron haber recibido amenazas de muerte y secuestro.
El último caso que mencionaremos a nivel nacional es el sucedido entre Violeta Lagunes precandidata a la alcaldía de Puebla y el periodista Fabián Gómez de noticias contraparte quien en una columna utilizo adjetivos para describirla como "promiscua, golfa y la señaló de tener nombre de fichera".
En Nayarit el caso más reciente de este tipo de violencia política en razón fue el cometido por el regidor Martín Heriberto Vázquez de Santiago Ixcuintla, quien al responder a la denuncia señaló que "se había excedido en su carácter varonil", al enviar mensajes de Whatsapp.
Aunque en todos los casos, donde la candidata no fue asesinada, se lograron restituir sus derechos político electorales, las sanciones para los agresores, fue tan solo de enviarlos a capacitación sobre género.