Marisol ha sido una de las tantas mujeres que debe enfrentar todos los días el acoso y agresiones verbales, por parte de sujetos que en muchas ocasiones son sus compañeros de trabajo.
Y es que estos delitos se han vuelto común en las zonas industriales ubicadas en Toluca.
Estos lugares se han convertido en foco rojo para las mujeres ante la falta de seguridad y alumbrado público, lo que las convierte en blanco perfecto de la delincuencia.