Banderas rojinegras, mantas con demandas, y accesos restringidos es el panorama que se vive actualmente en seis facultades de la Universidad Autónoma del Estado de México, un hecho que por primera vez se presenta en la máxima casa de estudios.
La Facultad de Ciencias de la Conducta, fue la primera que entró en paro el pasado 21 de febrero, el principal motivo acoso e inseguridad en esta institución.
Administrativos y profesores, no pudieron ingresar a las instalaciones además de que suspendieron todo servicio que se brinda a la ciudadanía.
Cinco días después, la inconformidad de los alumnos alcanzó dos facultades más, Ciencias Políticas y Sociales así como Humanidades, a través de una asamblea los alumnos tomaron la decisión de cerrar sus puertas.
Para el 27 de febrero, alumnos de la facultad de artes decidieron sumarse al paro indefinido como parte de la protesta por la ola de violencia de género y acoso mismo que emprendió la comunidad universitaria desde el 21 de febrero.
Tan sólo pasaron unas horas, cuando la Facultad de Arquitectura y Diseño se sumó al paro a consecuencia de la violencia de género y que se evidenció con la colocación de tendederos de denuncias principalmente contra catedráticos.
Apenas transcurrían los primeros cuatro días de marzo, cuando la sexta facultad, Planeación Urbana y Regional ya era parte del paro indefinido.
Hasta el momento, las universitarias han presentado ante el Ministerio Público, 21 denuncias por acoso y hostigamiento sexual contra maestros y alumnos universitarios, entre 2018 y 2019, la institución destituyó a 16 profesores por Procedimiento de Responsabilidad Universitaria; en tanto, cuatro más fueron separados de sus cargos por renuncia o despido.