Cuando los animales son sustraídos de su hábitat para traficar con ellos, ha generado padecimientos cómo estrés, miedo, pero principalmente los hace agresivos ya que buscan defenderse del humano.
En el caso del Parque Ecológico Zacango, no se han registrado incidentes que tengan que ver con agresiones por parte de los animales a sus cuidadores, ya que si los exámenes dan cómo resultado un nivel de agresividad alto, los ejemplares son liberados.
Loros, canarios, tortugas, serpientes, monos y hasta tigres son utilizados como mascotas en domicilios particulares o son criados en cautiverio, sin embargo al estar en contacto con los humanos no quiere decir que su nivel de peligrosidad también disminuya.
De acuerdo con expertos, los animales que son sustraídos de su hábitat suelen ser los más agresivos ya que nunca han estado en contacto con los humanos.
Hoy en día tener alguna de estas especies en domicilio se le ha denominado mascotismo, la acción de retener animales silvestres en un domicilio particular o en cautiverio como si fueran animales de compañía o mascotas.