Ante la crisis económica y la pérdida de empleo por la que atraviesan familias mexiquenses, Doña Reynalda una mujer de origen otomí de la zona norte de Toluca expresó que en su comunidad retomaron el trueque.
Esto debido a que algunos padres de familia se quedaron sin empleo y sin ingresos, pero sobre todo cuando los productos se encarecieron y cuando algunas otras personas se enfermaron de covid-19, pues los tratamientos médicos fueron caros.
Este pueblo originario aún comparte un poco de alimento con aquellas personas que no tenían para comer, mientras que otros más han recurrido a lo que cosechan.
Además de que otras personas, principalmente varones tuvieron que ejercer algún oficio de carpinteria, albañilería o costura para enfrentar las carencias económicas.