Hombres armados atacaron con explosivos una prisión del estado de de Owerri (...), en el sureste de Nigeria y liberaron a MIL 844 presos, así lo informó Francis Enoborre, portavoz de los servicios penitenciarios en un comunicado.
Testigos narran haber visto a un número importante de hombres armados a bordo de camionetas (...) Inmediatamente atacaron al personal de la prisión antes de volar la puerta principal", agrega el comunicado.
Por su parte, el responsable de prensa de las prisiones del estado de Imo, James Madugba, confirmó el ataque e invitó a los habitantes a "continuar dedicándose a sus asuntos", afirmando que la "situación estaba bajo control".
El vecino estado de Abia decretó un toque de queda de 22H00 a 06H00 por este ataque, el más importante contra una prisión en la historia reciente del país.
El presidente nigeriano, Muhammadu Buhari, condenó lo ocurrido, y llamó a los autores "terroristas" y "anarquistas", pero sin nombrar al movimiento Pueblo Indígena de Biafra (IPOB, por sus siglas en inglés).