Llegó la temporada más calurosa del año y con ella, largas horas de sol que sumado a las condiciones climáticas, pueden representar un riesgo para su salud.
De acuerdo con expertos de la salud, la exposición prolongada a los rayos del sol pueden originar quemaduras, calambres, insolación, vómitos y deshidratación.
Sin embargo en casos extremos puede desencadenar en convulsiones, lesiones permanentes en la piel desarrollando cáncer, golpes de calor y en casos extremos la muerte.
Expertos recomiendan tomar medidas preventivas para evitar este tipo de consecuencias, como utilizar protección solar, no exponerse al sol en las horas con mayor radiación solar, tomar abundante agua y consumir frutas de temporada.
Para evitar lesiones en la piel, que puedan ocasionar problemas futuros, la protección solar es fundamental, ya que es necesario el uso de bloqueador con un índice de protección solar superior al 100.
Es de destacarse que la población más vulnerable a sufrir las consecuencias de una exposición prolongada al sol y la radiación solar son menores de 15 años y adultos mayores.
Así que ya lo sabe, si en esta semana santa disfrutará de un chapuzón en albercas, playas o demás cuerpos de agua, protéjase para evitar malas experiencias.