En México la impartición de justicia es una de las funciones públicas más importantes, que lleva a la preservación del Estado de Derecho y la seguridad jurídica, sin embargo en México existe un déficit de jueces para atender las demandas de justicia.
A nivel nacional solo hay 4.6 jueces por cada 100 habitantes.
El Estado de México, la entidad más poblada del país con más de 17 millones de habitantes, también atraviesa por una insuficiencia de personal juzgador e impartidores de justicia, sumando jueces y magistrados, con tan solo 2.8 jueces por cada 100 mil habitantes.
De acuerdo al Censo Nacional de Impartición de Justicia Estatal, cada juez realiza el trabajo de al menos tres jueces mexiquenses, lo que causa severos impactos en la operación de los órganos jurisdiccionales y por ende compromete los casos, pues para obtener una justicia pronta y expedita se requiere de un plazo que en muchas ocasiones no se puede cumplir por diversos factores, lo que define a los procesos judiciales como lentos.
Este rezago judicial requiere una mejora en la administración judicial que fortalezca a los tribunales locales y por ende brindar una justicia pronta y expedita a las personas justiciables..