A días de que se conmemore el Día de Muertos en México, la ofrenda no puede faltar en los hogares de las familias mexiquenses para recordar a los que ya no están físicamente con nosotros.
En las ofrendas el agua es un elemento muy significativo, pues se considera fuente de vida y calma la sed de los visitantes.
La sal, es el elemento de purificación que sirve para que el alma no se corrompa en su viaje de ida y vuelta.
El pan de muerto, por un lado, representa la cruz de Cristo; Las tiras sobre la corteza representan los huesos y el ajonjolí, las lágrimas de las ánimas que no encuentran descanso.
La flor de nube, terciopelo y la tradicional flor de cempasúchil , son flores que decoran las ofrendas , su aroma atrae y guía a las almas.
Las calaveritas hacen alusión a la muerte.