Estudiantes de UAEM participaron en proyecto arqueológico
Onan Israel García Cervantes y Sonia Itzel Mendoza Vera, estudiantes de la Licenciatura en Arqueología del Centro Universitario Tenancingo de la Universidad Autónoma del Estado de México, participaron en el proyecto arqueológico Usumacinta Medio, cuya temporada de excavación de 2018 se desarrolló de febrero a mayo en el Estado de Tabasco.
Usumacinta Medio es un proyecto codirigido por la Universidad Nacional Autónoma de México y la Universidad de Arizona, a cargo de los arqueólogos Rodrigo Liendo, de México; Daniela Triadan, de Suiza, y Takeshi Inomata, de Japón.
La excavación, que se realizó en las comunidades Villa El Triunfo y El Naranjito, en el municipio de Balancán, en Tabasco, a unos 20 kilómetros de Guatemala, tiene como objetivo conocer la relación entre la cultura olmeca, que se desarrolló en el periodo preclásico, y la maya, en el clásico.
Onan Israel García Cervantes explicó que, con Sonia Itzel, participó como practicante invitado en la excavación de este proyecto y tuvo oportunidad de realizar diversas actividades de campo, desde la observación hasta el trabajo directo en el área.
"Fue una experiencia integral. Aprendimos, incluso, sobre la manera en que debemos conducirnos con las personas de las comunidades para que tuvieran la disposición de trabajar con nosotros, cómo organizarnos en campo, cómo instalar un campamento base y principalmente, sobre las responsabilidades del trabajo arqueológico".
Indicó que además, tuvieron la posibilidad de practicar con la tecnología Lidar -Light Detection and Ranging o Laser Imaging Detection and Ranging-, que es un escáner con láser instalado en una avioneta, mediante el cual se puede detectar con mayor precisión lo existente en la superficie de excavación.
El estudiante universitario aseguró que los conocimientos adquiridos en el Centro Universitario UAEM Tenancingo les permitieron desenvolverse con mayor familiaridad en estos trabajos.
El proyecto arqueológico Usumacinta Medio contempla 10 temporadas, durante las cuales se pretende rescatar las suficientes evidencias sobre la evolución de la cultura olmeca en la maya.
