Como cada año, el 28 de agosto, la comunidad de San Mateo Atarasquillo en el municipio de Lerma, se prepara para honrar al Señor de Chalma, en el día de San Agustín.
Esta festividad, que une los aspectos religiosos con la cultura popular, es un testimonio vivo de la identidad y la devoción de la comunidad hacia sus raíces.
Uno de los aspectos más notables de esta festividad es la famosa "Danza de los Arrieros". Una representación colorida y animada de la vida cotidiana de los arrieros, quienes eran responsables de transportar mercancías y bienes a través de los senderos empinados.
La implementación de esta celebración fue llevada a cabo por la Orden de los Agustinos en 1906, quienes jugaron un papel esencial en la evangelización de la región.
A través de la danza, la música, las procesiones y las misas, los habitantes de esta comunidad renuevan su compromiso con su patrimonio y dan testimonio de su fe.