Francia anunció la nacionalización de la principal empresa de energía nuclear.
La primera ministra francesa, Élisabeth Borne expresó: "Confirmo hoy la intención del Estado de poseer el 100% del capital de EDF", de cara a "reforzar su capacidad para llevar a cabo lo antes posible proyectos ambiciosos e indispensables para nuestro futuro energético", dijo la funcionaria.
Durante su Declaración de Política General ante el nuevo Parlamento, la jefa de gobierno desde mayo reafirmó la apuesta de Macron por la energía nuclear, junto a las renovables, para lograr la neutralidad de carbono.
El gobierno francés prevé que en unas circunstancias como las actuales, agravadas con la guerra en Ucrania, el resto de los mercados de la energía en Europa seguirán sus pasos, con nacionalizaciones totales o parciales.
El Estado francés cuenta ya con casi el 84% de las acciones de EDF, otra empresa estatal; un 1% pertenece a los trabajadores y el 15% restante son acciones institucionales e individuales.
El anuncio se produce cuando el grupo, muy endeudado, enfrenta además una serie de desafíos como la construcción de nuevos reactores EPR anunciada por Macron o problemas de corrosión en tuberías de varios de sus 56 reactores.
La acción de EDF recibió positivamente la noticia en la Bolsa de París, donde progresó 5.56% a 8.28 euros (8.44 dólares). Antes de las declaraciones de Borne, la cotización caía un 5%.
La Unión Europea (UE) y sus dos principales potencias se mostraron convencidas de acelerar la transición energética, en medio de la invasión de Rusia a Ucrania que no solo disparó los costos de la energía, sino que obligó a tomar drásticas decisiones para reducir de una vez la dependencia de los hidrocarburos rusos.
Mientras el Parlamento Europeo decidió otorgar el sello "verde" al gas y la energía nuclear, Francia anunció la nacionalización de la principal empresa de energía nuclear, y el canciller alemán se comprometió a "turboalimentar" la expansión de las energías renovables.
La decisión de nacionalizar el gigante eléctrico EDF en Francia fue aplaudida este jueves por el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien intentó algo similar en México pero el plan no prosperó.
"Ahora los franceses que ya tenían una participación en esa empresa considerable necesitaban más libertad para poder operar, garantizar enfrentar el problema que tienen de la falta de insumos para la generación de energía por la guerra de Rusia con Ucrania", dijo mandatario.