El grupo chií libanés Hizbulá lanzó este martes una serie de ataques de proyectiles contra los Altos del Golán, ocupados por Israel. Este bombardeo es una respuesta a los recientes ataques aéreos israelíes que el lunes causaron nueve heridos en el Valle de la Bekaa, una región clave para Hizbulá en el este del Líbano.
Hizbulá informó que sus combatientes atacaron dos importantes instalaciones militares israelíes: el cuartel general de la División Golán 210 en las barracas de Nafah y el cuartel de artillería y brigada de blindados en las barracas de Yarden. Estos ataques fueron en represalia por los bombardeos israelíes que, según el Estado judío, tenían como objetivo almacenes de armas del grupo chií.
La Agencia Nacional de Noticias del Líbano (ANN) detalló que los bombardeos israelíes alcanzaron tres puntos diferentes en el distrito de Baalbek, en la región oriental del Líbano, que se encuentra lejos de la frontera habitual de enfrentamientos.
Baalbek, conocida por sus ruinas grecorromanas declaradas patrimonio de la humanidad por la Unesco, ha sido bombardeada por Israel en varias ocasiones en los últimos meses, al igual que otras áreas del Valle de la Bekaa.
El reciente aumento en las hostilidades refleja una escalada de tensión que ha durado más de diez meses entre Hizbulá e Israel, principalmente en áreas cercanas a la línea divisoria entre ambos países. La tensión se incrementó tras el bombardeo israelí que mató al máximo comandante militar de Hizbulá, Fuad Shukr, hace tres semanas, reavivando temores de un conflicto a gran escala.