El municipio de Toluca presenta una serie de fallas geológicas escalonadas y fracturas, resultado de su ubicación en una región sísmicamente activa. Se calcula que en la capital mexiquense hay al menos 17 fallas geológicas y 22 zonas de fracturamiento.
Esto implica la conformación de una extensa e irregular superficie susceptible de inundaciones, además de limitar las condiciones para asentamientos humanos en algunas zonas.
Santa Ana Tlapaltitlan ha sufrido los estragos de dichas fallas geológicas. Según el Atlas de Riesgo de Toluca, por esta localidad atraviesa una severa línea de fractura, al igual que Santa Maria Totoltepec y San Pedro Totoltepec.
En el año 2021 debido a la falla geológica se verificó el hundimiento en varias calles de Santa Ana Tlapaltitlán dejando afectaciones en hogares y calles.
El problema no se ha resuelto de fondo. La vida cotidiana sigue sobre la falla geológica, que parece olvidada, pero ahí está, latente.