La vejez, que debería ser una etapa de tranquilidad y disfrute, se ha convertido para miles de mexiquenses en una lucha constante por la supervivencia.
Según el Plan de Desarrollo del Gobierno estatal 2023-2029, la incidencia de pobreza en personas adultas mayores ha experimentado un preocupante incremento.
En el Estado de México existen 2 millones 390 mil adultos mayores que requieren atención y apoyo directo del gobierno, principalmente en materia alimentaria, económica y de salud. Dentro de este grupo 103 mil 235 viven en pobreza extrema.
La historia de Juana Pérez es un claro ejemplo de la realidad que enfrentan muchos adultos mayores en el Estado de México.
A sus 75 años, esta mujer originaria de San Andrés Cuexcontitlán se ve obligada a salir diariamente a las calles de Metepec para pedir limosna. Hace tres décadas, perdió a su esposo e hijo en una peregrinación, y posteriormente, su yerno la despojó de su patrimonio.
La vida de Juana es un reflejo de la situación de miles de adultos mayores que, tras una vida de trabajo y esfuerzo, se encuentran en una situación de extrema vulnerabilidad.
La falta de oportunidades, la discriminación y la ausencia de políticas públicas adecuadas los empujan a vivir en condiciones de pobreza y precariedad.
Es fundamental fortalecer los sistemas de salud y asistencia social, así como las redes familiares y comunitarias para que los adultos mayores puedan acceder a servicios de calidad y a un envejecimiento digno.