Es en carretillas como algunos vendedores acercan a los hogares lo que dan las milpa y los montes.
Con la temporada de lluvias brotan los hongos, las flores de calabaza y los quelites.
Es cuando algunas familias aprovechan para hacer su agosto y tener un ingreso para vivir.
Sus ventas no están garantizadas, pero estas familias todos los días salen con la esperanza de sacar para comer.