La carne y el pollo son de los productos más adquiridos dentro de una dieta básica de las familias mexiquenses.
Según informes de la GAIN (Global Agricultural Information Network) del USDA (Departamento de Agricultura de los EUA) en México el pollo ha incrementado su producción un 3 por ciento este 2023 con respecto al 2022 y la carne ha decaído en producción un 5.3% aumentado un 1.5 por ciento.
A causa del aumento de precios, la población ha optado por sustituir estos alimentos con productos provenientes de la tierra como las habas, flor de calabaza, quelites, y guajes.
Pero las ventas de los productores de verduras y legumbres siguen siendo bajas, lo que demuestra que no toda la población opta por consumirlas.
Los alimentos cosechados de la tierra, son conocidos por tener un grado importante de proteína, vitaminas y potasio, además de que el precio es considerablemente más accesible.