Actualmente la influencia de la industria asiática en el mercado mexicano ha tenido un crecimiento significativo.
Con una relación comercial que se remonta desde la época de la colonia. El año pasado, el comercio bilateral entre México y China alcanzó su punto más alto llegando a los 116,000 millones de dólares, con un aumento en la exportación de productos del 25% según datos de la secretaría de Economía.
Si bien la presencia de productos chinos en el mercado mexicano no es algo nuevo, lo que resulta novedoso para el público mexicano es encontrar estos productos en tiendas físicas a precios reales, lo que ha generado un gran interés en estas tiendas.
Con un inventario que abarca desde productos de uso diario, belleza personal, moda, hasta artículos electrónicos y decoración para el hogar a módicos precios, estos almacenes se han convertido en una atracción irresistible.
Pese a la percepción negativa que se tiene de los productos de origen Chino, la capacidad de estas tiendas para mantener su atractivo a través de las redes sociales ha sido fundamental atrayendo un público joven ávido de nuevas experiencias.
Con desafíos y oportunidades en juego, siendo una oferta atractiva para comerciantes y público en general. Los almacenes y tiendas de productos Chinos han traído consigo una dosis de diversidad, atractiva y competencia hacia una escena comercial en constante evolución.