A puerta cerrada la madre y familiares de Pamela acudieron al centro ceremonial Otomí en Temoaya la tarde del domingo para protestar y exigir justicia por el asesinato de la joven de 16 años.
Cerca de 8 personas realizaron un pequeño homenaje a la memoria de la joven, quien fue privada de la vida de manera violenta el pasado 9 de Mayo en el inmueble donde vivía.
A su parecer de la mamá y demás familiares Pamela era una joven estudiante con aspiraciones profesionales, la cual no era una persona problemática pues tanto ella como sus hermanos apoyaban en las actividades en casa.