En el corazón del pueblo mágico de Metepec, habita una familia que ha tejido con barro los sueños de generaciones: los Nonato León. Una dinastía de alfareros que ha preservado una tradición ancestral por más de cuatro décadas.
El maestro Juan Carlos Nonato Díaz, patriarca de esta familia, heredó el amor por la alfarería de su padre, Don Armando, y desde entonces ha dedicado su vida a mantener viva esta legendaria tradición.
Junto a su esposa María Teresa y sus hijos, Juan Carlos ha transformado sus sueños en realidad, moldeando el barro con pasión y dedicación. Cada pieza que nace de sus manos es un testimonio de su amor por el arte y su compromiso con preservar la cultura de Metepec.
La familia Nonato León ha encontrado en la unión y la perseverancia el motor que los impulsa a alcanzar sus metas.
Su talento los ha llevado a recorrer el mundo, llevando el arte de Metepec a lugares tan lejanos como Japón. Uno de sus logros más destacados fue obtener el Récord Guinness al crear el árbol de la vida más grande del mundo. Este monumental trabajo fue posible gracias al esfuerzo conjunto de toda la familia.
A pesar de los múltiples logros, viajes y reconocimientos, para la familia Nonato León lo más importante es la unión familiar y el honor de ser guardianes de una herencia invaluable.
En cada pieza que crean, los Nonato León plasman su alma y su corazón. Sus obras son un reflejo de su cultura, de sus raíces y de su pasión por el barro