Integrantes de la pasada administración de la Central de Abasto y que actualmente se encuentran en prisión por su probable responsabilidad en la muerte de nueve personas, habrían tratado de retomar el control de este lugar desde la cárcel y para ello habrían enviado a personas externas, así lo refirió Jesús López García, presidente de la Mesa Directiva.
Ante está situación fue necesario llevar a cabo una asamblea para ratificar a la actual Mesa Directiva, misma que se realizó en una carpa en las inmediaciones de las oficinas administrativas, las cuales permanecen resguardadas por la Fiscalía General de Justicia del Estado de México.
Finalmente, explicó que la seguridad está garantizada para los comerciantes y clientes, ya que hay 35 elementos a resguardo de manera externa e interna, además de las más de 70 cámaras de videovigilancia con las que cuentan.