La calle Aldama en pleno centro de Toluca se ha convertido en una zona de asaltos a peatones, robo a comercio y robo de baterías, así lo señalan empleados quienes dicen pese a estar a unos metros del ayuntamiento y del propio Palacio de gobierno la seguridad es nula.
Los afectados comentan que ante un incidente los policías son los últimos en llegar,por ello hacen un llamado a las autoridades de seguridad para realizar rondines y mantener vigilancia permanente.