Rusia y la NASA han anunciado la continuación de su cooperación en vuelos espaciales compartidos para 2025, a pesar de las tensiones entre ambos países por la guerra en Ucrania.
Según informó Roscosmos, la agencia espacial rusa, en febrero del próximo año, el cosmonauta ruso Kiril Peskov viajará a la Estación Espacial Internacional (EEI) a bordo de la nave Crew Dragon, como parte de la misión Crew-10.
Por su parte, el astronauta de la NASA Jonathan Kim volará a la EEI en marzo a bordo de la nave rusa Soyuz MS-27.
Este intercambio es parte de un acuerdo firmado en 2022, que originalmente cubría vuelos compartidos entre 2022 y 2024, pero que ahora se ha extendido un año más.
El acuerdo permite que cosmonautas rusos vuelen en naves estadounidenses y viceversa, asegurando que ambos países mantengan acceso continuo a la EEI, independientemente de problemas técnicos en sus respectivas naves.
Además, Roscosmos adelantó que en 2026 lanzará la nave Soyuz MS-29, con la cosmonauta Anna Kíkina entre sus tripulantes.
Esta colaboración demuestra la importancia de la cooperación internacional en el espacio, incluso en tiempos de tensión política.