Abuso de autoridad, desaparición forzada, persecuciones y agresiones, sufren familiares de mujeres víctimas de violencia en Chimalhuacán. En una manifestación pacifica frente a la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), Irinea Buendía, defensora en Derechos Humanos, exigió a las autoridades cesar la violencia cometida contra feministas que fueron desalojadas arbitrariamente el 3 de abril. Momento en que el grupo de mujeres se mantenían frente a la Fiscalia Regional por el caso de lIrene Martínez, cuya hija tenía 12 años cuando fue violada por policías municipales hace dos años