Según un estudio del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en México hay 1.452 cementerios públicos, de los cuáles la disponibilidad de tumbas es del 19% un número nunca antes visto.
Esto se da tras el estallido de Covid-19 y el desarrollo de enfermedades cómo el cáncer, diabetes, problemas renales, creando una tasa de mortalidad en aumento.
Tan sólo en el Estado de México el promedio de ocupación en panteones y cementerios se encuentra en un 66 por ciento, colocándose en la cuarta posición, solo por debajo de Puebla, Ciudad de México y Tlaxcala.