En el corazón de Metepec, se encuentra el taller "La Espuela de Oro", un santuario donde el cuero se transforma en obras de arte gracias al talento y la pasión de Don Isidro López Tello. Heredero de una tradición familiar que se remonta a 1905, Don Isidro representa la tercera generación de talabarteros que han dedicado su vida a mantener vivo este oficio ancestral.
La talabartería, como bien la define Don Isidro, es "el arte de trabajar el cuero para la charrería". Un arte que exige dedicación, paciencia y un conocimiento profundo de las propiedades de la piel, desde la resistente piel de res hasta la exótica piel de pitón o caimán.
A lo largo de su trayectoria, Don Isidro ha cosechado innumerables reconocimientos, posicionándose como un referente de la talabartería mexiquense. Su trabajo ha traspasado fronteras, llegando a manos de celebridades como el cantautor Joan Sebastián y ex presidentes de México.
El camino no ha sido fácil. La talabartería, como tantos otros oficios artesanales, ha tenido que adaptarse a los cambios del tiempo. La llegada de la tecnología, la competencia de productos chinos y la evolución de la charrería han puesto a prueba la capacidad de Don Isidro para reinventarse.
A pesar de estos retos, Don Isidro se mantiene firme en su compromiso de preservar este legado ancestral. Su taller es un espacio donde la talabartería es más que un oficio, es una pasión que lo llena de vida y lo conecta con sus raíces.
Día a día, trabaja incansablemente, transmitiendo sus conocimientos a sus hijos y a las nuevas generaciones de talabarteros, asegurando así que la "Espuela de Oro" continúe brillando por muchos años más.
La Talabartería se resiste al olvido y la "Espuela de Oro" es más que un taller, es un símbolo de la tenacidad, la creatividad y el amor por el arte que caracterizan a los artesanos mexicanos