Preocupación y miedo incluso a perder la vida, es lo que sienten vecinos, trabajadores y estudiantes que todos los días tienen que caminar junto a varios inmuebles que se encuentran a punto de colapsar, sin embargo no han podido ser demolidos ya que son catalogados como inmueble históricos por parte del Instituto Nacional de Antropología e Historia.
Señalan que el riesgo de un colapso aumenta con las lluvias que se han registrado, ya que esto hace que las paredes se reblandezcan.