Ante la creciente escasez de agua que enfrenta México, la Universidad Autónoma del Estado de México ha dado un paso audaz hacia la sustentabilidad, implementando un innovador sistema de captación de agua de lluvia que ha revolucionado la gestión hídrica en sus instalaciones.
El Instituto de Ciencias Agropecuarias y Rurales de la UAEMéx, ante la necesidad de garantizar el suministro de agua para sus actividades cotidianas y de investigación, desarrolló hace seis años un sistema que aprovecha al máximo las precipitaciones pluviales.
A través de un proceso de filtración meticuloso, que incluye el uso de grava, arena y carbón activado, el agua captada es purificada para diversos usos, desde sanitarios y limpieza hasta, incluso, consumo humano.
Uno de los logros más destacados de este proyecto es la producción de agua potable de alta calidad bajo la marca "Lluvia ICAR". Gracias a un sistema de filtración avanzado, se eliminan impurezas como plomo, sodio y nitratos, garantizando un líquido cristalino.
Actualmente, el ICAR cuenta con 18 captadores de agua de lluvia que alimentan tres cisternas con capacidad para almacenar hasta 312 metros cúbicos de agua.
Este volumen no solo satisface las necesidades del instituto, sino que también ha permitido comercializar el excedente en envases reciclables de vidrio, generando ingresos que se reinvierten en el mantenimiento y mejora del sistema.
El ICAR tiene como objetivo replicar este sistema a mayor escala, con el fin de compartir los conocimientos adquiridos y contribuir a la mitigación de los efectos de la sequía en otras regiones.