La población de Temascalcingo envejeció y al sonido del violín celebró al campo,y a la fertilidad de la tierra.
Son los viejos de corpus, los xitas de Temascalcingo.
Ajuareados de pies a cabeza, con máscaras hechas de cáscara de maguey e ixtle bajan de sus barrios mazahuas y otomíes hacia el centro para pedir por la lluvia.
Lo hacen con ritos, danzas y copal.
Es el día en que todos envejecen, donde los más pequeños son los más viejos del lugar.
Tradición, fe, y herencia son los tres elementos que inundan de color las calles del municipio de Temascalcingo.
Son más de 10 kilos los que cargan a cuestas, debido a las máscaras que cada año se reinventan con más color, con más tradición.
Baile que es bien recibido por pobladores y visitantes que se suman a una de las celebraciones más emblemáticas del estado de México, los xitas de Temascalcingo.