Diócesis en contra de la cultura de la muerte

Fue el sacerdote José Luis Escamilla, representante de la Diócesis, quien expresó que la decisión de los ministros de la corte es lamentable, pues se escuda en el respeto a los derechos de las mujeres para legitimar la muerte de un ser indefenso, por lo que la Iglesia no puede aprobar dicho precedente legal, aunque se mantienen al margen de las decisiones que toma el Estado Mexicano.

A nivel nacional, fue el Episcopado Mexicano la encargada de pedir a la Suprema Corte reconocer la dignidad del ser humano en todas las etapas de la vida, y pidiendo también su reconocimiento legal.

La Diócesis continuará promoviendo el respeto a la vida humana desde el momento de la concepción apoyando a las mujeres que se encuentren en un entorno complicado a través de grupos en diferentes parroquias para evitar que el aborto pueda ser una solución viable.