Con estrictas medidas sanitarias el templo de San Judas Tadeo de la colonia Las Torres en Torreón, llevó a cabo sus fiestas patronales en devoción al santo de las causas imposibles.
Debido a la pandemia del Covid-19 que ha impactado al mundo entero, las misas se realizaron a una capacidad del 70 por ciento y se colocaron sillas al exterior. Además se prohibió la instalación de vendedores ambulantes y la entrega de reliquias y en el estacionamiento se habilitó un altar para que los fieles en automóvil no tuvieran que bajar y recibieran la bendición de los sacerdotes.
Para el obispo, Luis Martín Barragán Beltran, la pandemia del Covid-19, representó un reto para la iglesia tanto en su operación administrativa como en la comunicación con sus feligreses, por lo que fue positivo volver a ver a la gente en el templo.
"Aunque estuvimos insistiendo que en su casa se hicieran oraciones o siguieran las transmisiones, que bueno que la gente conserva en su corazón la necesidad del encuentro, de la peregrinación."