En medio de la reciente llegada de una ola de migrantes a Chiapas, en la frontera sur de México, se ha observado un fenómeno poco común en la Laguna de Durango. Durante varias décadas, este punto ha sido un paso recurrente para aquellos que buscan cruzar hacia los Estados Unidos en busca del llamado "sueño americano". Sin embargo, en esta ocasión, la presencia de indocumentados ha sido mínima.
Según Raúl Meraz, Subsecretario de Gobierno en la Laguna de Durango, la baja afluencia de migrantes se atribuye a la situación de violencia que se vive en el estado de Zacatecas "A recomendación de ellos mismos y de algunas instancias de otras entidades, decidiendo cruzar de San Luis hacia Matehuala, Saltillo o hacia otras rutas para evitar cruzar por estado como Zacatecas, donde tenemos trayectorias terroríficas" declaró.
Este cambio de ruta representa un intento por parte de los migrantes de evitar los peligros asociados con Zacatecas y encontrar rutas alternativas más seguras. Aunque el "Título 42" expiró recientemente, ofreciendo una oportunidad para aquellos que esperaban cruzar, la baja afluencia de migrantes en la Laguna de Durango sugiere que muchos han optado por evitar esta ruta tradicional debido a la preocupante situación de violencia en Zacatecas.