El 30 de abril se publicó en el Diario Oficial de la Federación la reforma a la Ley de Pensiones y un día después se firmó el decreto de creación del Fondo de Pensiones para el Bienestar, eje rector de estas modificaciones a la ley.
"Esta reforma reivindica el derecho de las y los trabajadores a contar con una pensión suficiente y digna para el último tramo de su vida", dijo Luisa María Alcalde, secretaria de Gobernación.
Uno de los principales planteamientos de la reforma a la ley de pensiones es la creación del Fondo del Bienestar, para que quienes ganen menos de 16,777.78 pesos al mes reciban una pensión con 100% de su último salario, ya que el fondo vendrá a complementar la pensión de quienes empezaron a cotizar desde julio de 1997 y se jubilen a partir de los 65 años de edad bajo el sistema de Afores.
La creación de dicho fondo ha sido ampliamente criticada debido a que una de las principales fuentes financieras serán los saldos de las subcuentas de retiro, cesantía en edad avanzada y vivienda de personas de 70 años que coticen en el IMSS o de 75 años, que coticen en el ISSSTE y no hayan sido reclamadas ni tengan movimiento.
Se estima que a la fecha existe un monto de 40 mil millones de pesos de cuentas no reclamadas.
No obstante, la ley establece que deberán notificar un año antes sobre la existencia del recurso, para que soliciten su devolución o de lo contrario pasarán al Fondo. De no hacerlo, también podrán solicitar la devolución, sin embargo, la entrega estará condicionada a la suficiencia del recurso.
Otras fuentes de financiamiento provendrán de las incautaciones del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado, de los recursos del proceso de liquidación de Financiera Nacional de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y Pesquero, y también de las utilidades de entidades paraestatales como el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) y el Tren Maya.
El Fondo de Pensiones para el Bienestar será administrado por el Banco de México. La secretaria de Gobernación informó que será el 1° de julio cuando se pague la primera pensión con 100 por ciento del salario a trabajadoras y trabajadores que entren dentro de este nuevo esquema.