El presidente de Estados Unidos Joe Biden acudió a la Conferencia del G20 en Roma con otros líderes políticos, sin embargo se hizo viral, ya que se quedó dormido durante treinta segundos, todo quedo grabado, el video fue difundido en redes sociales.
Un miembro de su equipo se tuvo que acercar a él para despertarlo.
La COP26 de Glasgow comenzó este domingo con más de 200 líderes internacionales unidos en su lucha contra el cambio climático. Cada país ha ido relatando sus objetivos propuestos para la acción climática y transición ecológica. Sin embargo, parece que estas intervenciones no tienen la misma importancia para todos.
No es la primera vez que ocurre. La última vez el presidente estadounidense se quedó dormido ante las cámaras en el encuentro de la Casa Blanca con el primer ministro de Israel, Naftalí Bennet, ocurrido en agosto, por lo que Joe Biden fue duramente criticado en redes sociales por usuarios y congresistas republicanos después de que se filtrara el vídeo.
???#Viral El presidente #Biden se queda dormido? en plena cumbre climática.
? @MeganoticiasMx (@MeganoticiasMx) November 1, 2021
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?Cortesía pic.twitter.com/Vl37Bnz2UQ
En su intervención Joe Biden dijo que esta es la década que determinará las próximas generaciones. "Es la década decisiva en la que tenemos la oportunidad de demostrarnos que podemos mantener el objetivo de (limitar el calentamiento a) 1,5 grados".
También advirtió que el cambio climático no se trata de una hipótesis, sino que ya afecta a las vidas de millones de personas cada día, incluso en su propio país, a causa de incendios descontrolados, inundaciones o sequías. "Ninguno de nosotros puede escapar a lo peor de lo que está por venir si no conseguimos aprovechar este momento". Y continuaba recalcando que después de desgranar los compromisos adoptados por el Gobierno estadounidense en los últimos meses, a lo largo de la cumbre Estados Unidos lanzará nuevas iniciativas en agricultura, combustibles fósiles o en la lucha contra la deforestación.
El demócrata exhortó a los países ricos a aumentar su apoyo financiero a los países en desarrollo, alegando que "ya no hay tiempo para rezagarse o pelear entre nosotros ante la amenaza existencial que supone la crisis climática". Finalmente expresó: "Hagamos de este el momento en que respondemos a la llamada de la historia".