La falta de solidaridad y el mal estado de la infraestructura pública en el centro de Torreón
son los principales obstáculos que enfrentan las personas con discapacidad para transitar
por su cuenta.
Luis Antonio Jacob Arteaga, padece ceguera y para acudir al centro comunitario del DIF
Nueva Rosita tiene que caminar por el centro de la ciudad, normalmente es acompañado de
su padre de la tercera edad; sin embargo cuando tiene que trasladarse solo el tiempo de
trayecto se multiplica.
"Yo por lo regular siempre ando con mi papá, pero es por lo mismo porque no
hay rampas, las banquetas son altas, hay pozos abiertos, hay alcantarillas sin tapas y
tengo que ir por fuerza con un familiar." 1.26
Además hizo un llamado a la ciudadanía para que sea más solidaria con los discapacitados,
ya que cruzar una calle puede tomarle varios minutos, pues algunos semáforos peatonales
que contaban con sonido de advertencia de encuentran descompuestos.
"Que la gente fuera más gente con los discapacitados, a veces estamos en una
esquina esperando a que nos ayuden a pasar y nos tardamos mucho tiempo porque
no vemos los carros y tardamos mucho en pasar y nadie te ayuda."
Fernando Mesta, entrenador de atletismo y halterofilia para personas con discapacidad,
coincidió con Luis Antonio en que las calles y banquetas de la ciudad no son aptas para las
personas con discapacidad visual o en silla de ruedas; sin embargo, también señaló que
muchos padres por sobreproteger a sus hijos con algún padecimiento, les impiden
desarrollar habilidades que les permita alcanzar autonomía e independencia.