En 2020 mientras el coronavirus SAR COV2 asediaba al mundo y la humanidad aún no contaba con una vacuna para contener el avance de la pandemia del Covid-19, la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano y la Agencia de Cooperación Alemán lanzaron una convocatoria para construir ciclovías en algunas ciudades del país para evitar la aglomeración de personas en el transporte público y frenar la proliferación de la enfermedad.
"Y el concurso la ganaron tres ciudades que luego la ampliaron a cuatro y una de ellas fue Torreón y que implicaba el concurso, que habría dinero para hacer un estudio."
Así nació la Ciclovida Colón, dos carriles confinados sobre la Calzada Colón, uno por cada sentido con una extensión de 3.6 kilómetros y que cuentan con pintura, bolardos y señalética que permite brindarles seguridad a los ciclistas que utilizan esta vialidad que conecta las tres principales vialidades de la ciudad: el bulevar Revolución, el bulevar Independencia y el bulevar Constitución.
"Me atrevo a decir que no hay obra pública en el municipio de Torreón que tenga más estudios que haya contado con más estudios, con más recursos diversos y con más socializacion que la Ciclovida. Para acabar pronto la Ciclovida tuvo más estudios que lo que están haciendo en Cuatro Caminos."
A decir del representante de Ruedas del Desierto, uno de los pocos colectivos que promocionan y defienden los derechos de peatones y ciclistas, esta infraestructura fue realizada siguiendo las normas de autoridades federales y organismos internacionales, por lo que rechazan el argumento del Ayuntamiento de la falta de consensos y estudios para edificar esta infraestructura.